ENCONTRANDO EL CAMINO.

Llega un momento de la vida, en el cual tienes que decidir qué camino seguirás.

Y eso, lo cambiará todo.

El punto no es que llegue el momento (porque seguramente llegará, o ya llego para algunos, como sea) lo que importa es que cuando llegue, estés listo, lista para decidir correctamente, para elegir lo que te hará pleno y verdaderamente feliz. Para elegir lo que te hará alegrarte por las mañanas, y agradecer por siempre de haber tomado ese camino.

¿Qué sucede cuando no tengo claro el camino?

En el libro Alicia en el país de las maravillas, hay una escena en donde Alicia camina por el bosque y se encuentra al gato Cheshire en la copa de un árbol. Al no saber el camino, Alicia le pregunta:

-          ¿Por qué camino debo seguir?

-          Eso depende, en gran parte, de donde quieras ir- le contesta el gato.

-          No sé, a cualquier lugar- dice Alicia.

-          Entonces, no importa el camino.

Saber dónde ir, esa es la clave.

Puede ser que la decisión que tienes que tomar es acerca de tus estudios (que tengo que estudiar), tu relación sentimental, si continuarla o no, si enamorarme de él (ella) o dejar pasar todo, si es con tu familia, o alguna decisión con tus amigos. Siempre habrá muchas voces. Cada uno con su propia agenda, con su propia manera de pensar.

Todos quieren que hagas algo como a ellos les parece, ¿te ha pasado? No es fácil identificar a donde ir cuando todos tienen un plan para ti. Un camino para ti.

Pero hay una voz que tiene el mejor camino, el mejor plan para ti. Ese camino, es el camino que tú mismo elegirías si vieras el fin desde el principio.  Es el camino que de verdad llenará tu corazón en plenitud. Que te hará verdaderamente feliz. ES EL CAMINO QUE DIOS TIENE PARA TI.

Escucha esto:

“Te haré entender,

Y te enseñaré el camino en que debes andar;

Sobre ti fijaré mis ojos” (Salmo 32.8)

Deléitate asimismo en Jehová,

Y él te concederá las peticiones de tu corazón.

Encomienda a Jehová tu camino,

Y confía en él; y él hará. (Sal 37.4-5)

Dios te ama mucho. Él tiene grandes planes para tu vida. Eres su hijo, su hija. El desea con ansias que tomes el camino que él tiene para ti porque ES EL MEJOR PARA TI.

¿Cómo puedo saber el camino de Dios?

1-      Ora. ¿No sabes orar? Habla con Dios como hablarías como un amigo. Él te conoce, te escucha, no importa cómo has sido en el pasado.

2-      Lee la Biblia, en ella tienes una carta de amor, que Dios te ha dejado. Allí puedes escuchar su voz.

3-      Confía en sus promesas. Él te va a cumplir a su tiempo. Háblale, dile lo que pasa, la decisión que tienes que tomar, el camino que tienes que elegir, sigue sus instrucciones y prepárate para las grandes cosas que Dios hará en tu vida.

Dale un abrazo a tus padres hoy, a tu hermano (a) y a tus amigos. Ámalos, quiérelos mucho, agradece por todos los buenos consejos y tómalos, aprécialos. Y recuerda, toda persona que te aprecia verdaderamente (tus padres, hermanos, amigos) te aconsejara con el corazón y te ayudará a que escuches la voz de Dios.

Llega un momento en la vida en que todo se reducirá a una decisión.

Encomienda a Dios esa decisión

Confía en Él, y Él lo hará.

Un abrazo para ti,